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El Gobierno guarda silencio sobre el adelanto electoral en Castilla y León
Sánchez inaugura el AVE a Galicia, un "verdadero vuelco" en la conectividad del noroeste peninsular
"El Gobierno no se pronuncia, por el momento, sobre el adelanto electoral en Castilla y León anunciado este lunes que ha hecho temblar el panorama político nacional. Una convocatoria que es precisamente la causa de que varios de los protagonistas políticos de la jornada no hayan coincidido a bordo de un tren a 300 kilómetros por hora, tal y como estaba previsto.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la vicepresidenta segunda y líder de Unidas Podemos en el Consejo de Ministros, Yolanda Díaz, han viajado en el trayecto inaugural del AVE a Galicia. Un viaje que ha contado con la presencia del Rey Felipe y en el que estaba previsto que participara el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.
No obstante, el anuncio electoral ha provocado un cambio en la agenda del presidente regional, que ha cancelado su incorporación al viaje, prevista durante la breve parada que finalmente la comitiva ha realizado a media mañana en Zamora.
Así pues, no se ha dado el cruce entre Mañueco y los líderes de los partidos que forman la coalición gubernamental. Tampoco ha habido palabras al respecto de ninguno de los dirigentes del Ejecutivo presentes en el viaje, que han limitado sus intervenciones a una breve declaración de pocos minutos dedicada a la llegada de la alta velocidad ferroviaria a Galicia.
Un trayecto "decisivo"
Un acontecimiento que todos los presentes han coincidido en valorar como un "hito histórico" y "decisivo" para Galicia y que se enmarca en un momento "simbólico" para el territorio, según ha explicado el presidente gallego, Alberto Nuñez Feijoó, en relación al 40 aniversario del estatuto de autonomía de Galicia y el doble año santo, entre 2021 y 2022.
Pese a la emoción del momento, Feijoó ha reiterado que Galicia "no ha sido de los primeros" territorios en recibir el AVE, y ha considerado "irrenunciable" que el resto de capitales de provincia gallegas tengan acceso en alta velocidad, porque gracias a esta conexión Galicia podrá competir "en igualdad y equidad" con el Mediterráneo y el sur peninsular en lo que a comunicaciones se refiere.
Con ligero adelanto, el tren inaugural ha partido desde la madrileña estación de Chamartín. Minutos antes, en pleno andén, muchos de los presentes han conocido la noticia del adelanto electoral en Castilla y León que ha supuesto que finalmente Alfonso Fernández Mañueco no participara en el trayecto.
Ya al filo del mediodía, la alta velocidad ha entrado en territorio gallego. Minutos después, en la estación de A Gudiña y entre música de gaitas y vítores al Rey, decenas de personas han recibido a la comitiva en una breve parada en las puertas de Galicia.
Poco después, el AVE ha llegado a Orense, en cuya estación se ha celebrado el acto de inauguración de la Línea de Alta Velocidad (LAV), y donde han tomado la palabra la ministra de Transportes, el presidente gallego y el presidente del Gobierno, quien ha celebrado el "verdadero vuelco" que supone para las conexiones con el noroeste peninsular este avance, en el que se han inyectado más de 10.000 millones de euros.
Una labor titánica"
El trayecto de AVE entre Madrid y Orense a través de Zamora ha tardado 20 años en terminarse. Su finalización ha supuesto una "labor titánica" para superar la compleja orografía gallega, ha destacado Raquel Sánchez, ministra de Transportes, en relación al último tramo, de unos 120 kilómetros, en los que la vía de alta velocidad atraviesa cerca de una treintena de túneles y otra treintena de acueductos, además de pasos muy estrechos.
Con la llegada del AVE a Galicia, el Gobierno prevé "conectar" ferroviariamente de forma "ultrarrápida" cerca del 30% del PIB nacional. Un logro que ha implicado a numerosos equipos de gobierno, tanto nacionales como autonómicos, de diferente signo. Es por ello que tanto Pedro Sánchez como Alberto Núñez Feijoó han agradecido el "impulso" dado por las administraciones lideradas por José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy.
EL Mundo
Sánchez inaugura el AVE a Galicia, un "verdadero vuelco" en la conectividad del noroeste peninsular
"El Gobierno no se pronuncia, por el momento, sobre el adelanto electoral en Castilla y León anunciado este lunes que ha hecho temblar el panorama político nacional. Una convocatoria que es precisamente la causa de que varios de los protagonistas políticos de la jornada no hayan coincidido a bordo de un tren a 300 kilómetros por hora, tal y como estaba previsto.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la vicepresidenta segunda y líder de Unidas Podemos en el Consejo de Ministros, Yolanda Díaz, han viajado en el trayecto inaugural del AVE a Galicia. Un viaje que ha contado con la presencia del Rey Felipe y en el que estaba previsto que participara el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco.
No obstante, el anuncio electoral ha provocado un cambio en la agenda del presidente regional, que ha cancelado su incorporación al viaje, prevista durante la breve parada que finalmente la comitiva ha realizado a media mañana en Zamora.
Así pues, no se ha dado el cruce entre Mañueco y los líderes de los partidos que forman la coalición gubernamental. Tampoco ha habido palabras al respecto de ninguno de los dirigentes del Ejecutivo presentes en el viaje, que han limitado sus intervenciones a una breve declaración de pocos minutos dedicada a la llegada de la alta velocidad ferroviaria a Galicia.
Un trayecto "decisivo"
Un acontecimiento que todos los presentes han coincidido en valorar como un "hito histórico" y "decisivo" para Galicia y que se enmarca en un momento "simbólico" para el territorio, según ha explicado el presidente gallego, Alberto Nuñez Feijoó, en relación al 40 aniversario del estatuto de autonomía de Galicia y el doble año santo, entre 2021 y 2022.
Pese a la emoción del momento, Feijoó ha reiterado que Galicia "no ha sido de los primeros" territorios en recibir el AVE, y ha considerado "irrenunciable" que el resto de capitales de provincia gallegas tengan acceso en alta velocidad, porque gracias a esta conexión Galicia podrá competir "en igualdad y equidad" con el Mediterráneo y el sur peninsular en lo que a comunicaciones se refiere.
Con ligero adelanto, el tren inaugural ha partido desde la madrileña estación de Chamartín. Minutos antes, en pleno andén, muchos de los presentes han conocido la noticia del adelanto electoral en Castilla y León que ha supuesto que finalmente Alfonso Fernández Mañueco no participara en el trayecto.
Ya al filo del mediodía, la alta velocidad ha entrado en territorio gallego. Minutos después, en la estación de A Gudiña y entre música de gaitas y vítores al Rey, decenas de personas han recibido a la comitiva en una breve parada en las puertas de Galicia.
Poco después, el AVE ha llegado a Orense, en cuya estación se ha celebrado el acto de inauguración de la Línea de Alta Velocidad (LAV), y donde han tomado la palabra la ministra de Transportes, el presidente gallego y el presidente del Gobierno, quien ha celebrado el "verdadero vuelco" que supone para las conexiones con el noroeste peninsular este avance, en el que se han inyectado más de 10.000 millones de euros.
Una labor titánica"
El trayecto de AVE entre Madrid y Orense a través de Zamora ha tardado 20 años en terminarse. Su finalización ha supuesto una "labor titánica" para superar la compleja orografía gallega, ha destacado Raquel Sánchez, ministra de Transportes, en relación al último tramo, de unos 120 kilómetros, en los que la vía de alta velocidad atraviesa cerca de una treintena de túneles y otra treintena de acueductos, además de pasos muy estrechos.
Con la llegada del AVE a Galicia, el Gobierno prevé "conectar" ferroviariamente de forma "ultrarrápida" cerca del 30% del PIB nacional. Un logro que ha implicado a numerosos equipos de gobierno, tanto nacionales como autonómicos, de diferente signo. Es por ello que tanto Pedro Sánchez como Alberto Núñez Feijoó han agradecido el "impulso" dado por las administraciones lideradas por José María Aznar, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy.
EL Mundo